Los textos que se presentan a continuación son ensayos sobre el análisis de un caso clínico, pertenecientes a la cátedra de Ética Profesional de Fonoaudiología UV.
Ética
en la atención fonoaudiológica
Introducción
Para
muchas personas puede ser muy simple el querer ayudar a alguien, siempre y
cuando se tengan las herramientas para hacerlo, pero para los que no poseen
esta capacidades o herramientas hay una gran problemática, esta es que si es
que la persona de verdad quiere ayudar pero no puede, ¿debe hacerlo?; hay mucho
que pensar en esa situación, ya que en cualquiera de los dos casos podría
causar algo malo, es decir, que puede perjudicar a la otra persona ayudándola
sin saber cómo, o bien no ayudándola. Esto se debe a que no siempre la decisión
que se tome será la correcta, es por eso que se debe analizar la situación
desde diversos puntos de vista. Para analizar el caso clínico que será descrito
a continuación, se revisarán diversos elementos con los que se puede examinar correctamente
el caso correspondiente.
Los
objetivos que se esperan cumplir en el análisis de la situación presentada en
el caso clínico son que al finalizar este informe se pueda haber discutido y
analizado de forma completa la relación entre terapeuta, en este caso un
fonoaudiólogo, y el paciente. También es muy importante haber relacionado esta
situación clínica con la integración de conceptos aprendidos durante la cátedra
y otras bibliografías para así ir complementando el análisis. Así también,
debemos ser capaces de haber identificado la importancia de la ética en la
situación y la decisión tomada posteriormente por el terapeuta que actúa en el
caso clínico.
Finalmente
en el análisis se hará una presentación del caso clínico correspondiente y se
examinarán en detalle los conceptos aprendidos en clases, así como también el
código que rige a los fonoaudiólogos. También se realizará una propuesta sobre
la intervención considerando todos estos conceptos éticos.
Marco Referencial
Programas
y estrategias propuestas por el Ministerio de Salud y de Educación:
En nuestro país, la parálisis cerebral, se encuentra dentro del plan del
MINSAL, el cual tiene programas de manejo de infantes que padecen este
trastorno y para la prevención de un parto prematuro, que es una de las principales causas de esta
enfermedad. Junto con el MINEDUC poseen programas de integración de
estos niños que necesitan de una educación especial.
Definición
del problema planteado: La parálisis cerebral,
es un tema muy importante porque es un conjunto de trastornos neuromotores
crónicos que se producen debido a un defecto en el desarrollo del cerebro. Esta
lesión debe producirse durante los tres primeros años desde el nacimiento, pero
algunos especialistas dicen que puede producirse también durante los primeros
cinco años.
Fisiopatología
y/o etiología del problema planteado: En niños con
PC, poseen un acortamiento de fibras musculares que se debe a que el
crecimiento óseo excede al muscular lo que hace más difícil la actividad
voluntaria y el estiramiento.
Factores
de riesgos: El riesgo de parálisis cerebral es
mayor en niños prematuros, sobre todo en los que pesan al nacer menos de 2.500
gramos, en los niños que tienen malformaciones congénitas a nivel de sistema
nervioso.
Signos
y síntomas del problema planteado: Los síntomas
que presenta un niño con parálisis cerebral se manifiestan porque le cuesta
gatear, sonreír o darse vuelta, estos síntomas varían y comprenden varias áreas
como lo es la visión y audición, dificultades en el habla y el lenguaje,
alteraciones perceptivas como las agnosias o apraxias y disquinesia.
Intervención
y/o tratamiento: La Parálisis Cerebral no
tiene tratamiento pero, si hay terapia, terapia física y de conducta. Una atención
adecuada que le permita mejorar sus movimientos y le permita alcanzar el mejor
nivel de comunicación posible podrá llevar una vida más plena.
Análisis del Caso clínico
1) Presentación del caso
En un pueblo
del sur de Chile un Fonoaudiólogo dedicado al tratamiento de los trastornos
específicos del lenguaje en el hospital del pueblo. Cierto día, recibe a Pedro
de 3 años con diagnóstico de parálisis cerebral, derivado del neurólogo que
pide realizar terapia de alimentación y lenguaje. El fonoaudiólogo explica a los padres que él se
dedica a cierta área de trabajo que no incluye la parálisis cerebral y que no
la podía ayudar. En tanto el niño tuvo que
esperar hasta el próximo año cuando pudo viajar a la ciudad más próxima al centro de rehabilitación infantil
(Teletón).
2) Valoración
Ética de la situación
Los
profesionales en general debemos ser personas integrales, capaces de cumplir
las diferentes necesidades que se nos plantean. Si nos abocamos al profesional
Fonoaudiólogo, si bien es una carrera que abarca diferentes áreas, de igual
manera se nos instruye en ellas como para poder manejarnos frente a diversas
situaciones que respectan del área fonoaudiológica.
Los
principios éticos que debemos tener al ser un profesional de la salud, son
principalmente respetar al paciente, en el sentido de que busca en nosotros una
ayuda profesional y apoyo para afrontar de mejor manera el problema. Todos
somos iguales y tenemos los mismos derechos a recibir una atención digna y ser
diagnosticados para mejorar nuestra salud y la calidad de vida. En este caso clínico, podemos ver que si bien
el profesional plantea que él no trabaja en el área de los pacientes con Parálisis
Cerebral, los cuales necesitan un tratamiento específico, que el no maneja
tanto como el área de lenguaje y deglución; se debe respetar al paciente, quien
merece el mejor diagnóstico y este fonoaudiólogo no se lo podía entregar por no
sentirse capacitado para ello. La atención que se le brinda es pésima, ya que
no se realiza ni siquiera una anamnesis para saber desde cuando padece Parálisis
Cerebral y así poder acercarse a la realidad del niño, para posteriormente
poder mostrar empatía hacia el paciente y su familia.
Por
otro lado, el mal actuar de este profesional y el no entregarle una solución a
su paciente, conlleva a que este mismo deba esperar durante un año para poder
tratarse, sin ni siquiera aconsejarle dirigirse a algún otro profesional. Se
presenta un trato poco digno y no favorable para el desarrollo de una posible
terapia de rehabilitación, frente al trastorno de deglución y de lenguaje que
el poseía. Además, de que su actuar frente a él es de manera inconsciente e
insensible, y de dejarlo en un estado vulnerable. El
Fonoaudiólogo puede elegir que pacientes tratar dependiendo de la comodidad que
este tenga frente al tratamiento que se le debe entregar, siempre y cuando
ayude al paciente a encontrar otro profesional que pueda satisfacer la
necesidad médica que posee la persona. Sin embargo, si el Fonoaudiólogo fuera
el único que existiera en esa ciudad, cosa que no se especifica en el caso,
pero al tratarse de una ciudad del sur podría existir una baja de profesionales
de la salud especialistas en áreas especificas, tendría que atenderlo de igual
manera, ya que según el Art. 6 del Código de Ética de Fonoaudiólogos de Chile
de 1983: “El fonoaudiólogo no podrá rehusar la atención de un paciente cuando
no exista otro colega que pueda hacerse cargo de éste.”.
Cabe
destacar, que a todo profesional de la salud se le exige una buena disciplina
de trabajo en equipo, y en este caso el fonoaudiólogo actúo de manera
individual, es decir, sin pedir ayuda a otro profesional que se manejara más en
el trastorno y ya qué el profesional le negó la atención al niño, tampoco buscó
a otro fonoaudiólogo que pudiera atenderlo, aliviándole la carga a la madre y
pensando en el tratamiento del paciente quien tuvo que esperar un año para
encontrar a alguien que pudiera llevar su caso.
3)
Propuesta de intervención considerando los aspectos éticos implicados
Al tratar fonoaudiológicamente a un paciente se debe tomar en cuenta lo clínico junto con lo psicológico, ya que este deberá ser tratado como un ser humano como tal. Requiriendo de empatía a la hora de tratarse, además de competencia ya que el paciente y su familia recurren a él con la esperanza de que el profesional les brinde apoyo para su mejora.
En términos clínicos, el niño al tener PC el fonoaudiólogo podría ayudarlo en que pueda realizar mejor el proceso de respiración nasal y disminuir el babeo, además de conseguir una mayor coordinación fonorespiratoria lográndose una emisión más clara con volumen adecuado, estimular la musculatura que corresponde a la cavidad oral para el mejoramiento de la deglución. Además, debemos asegurarnos de que no exista presencia de algún tipo de TEL, aunque al ser derivado de un neurólogo es posible que no posea trastornos específicos del lenguaje, ya que los problemas de lenguaje estarían relacionados a otro trastorno mayor para esto se deben aplicar test.
Por último, se debe tener en cuenta que para un mejor resultado frente al tratamiento que necesite el paciente el trabajo interdisciplinario, en este trabajo se debe incluir la ayuda de los padres para que el paciente este en un constante terapia y no solo cuando vaya a recibir la atención. En conclusión, debemos antes que todo realizar una anamnesis, luego realizar algunas pruebas para determinar el trastorno a tratar y poder realizar la terapia respectiva, y mientras más tiempo sea aplazado este tratamiento más difícil será obtener los resultados esperados ya que al crecer el niño va perdiendo la potencialidad de aprendizaje.
Conclusión
Montserrat Avilés Zavando
Después de analizar este caso clínico, pude concluir que la decisión tomada por el fonoaudiólogo no fue la más adecuada ya que al no encontrarse en condiciones para realizar la terapia, pudo haber derivado a algún otro fonoaudiólogo que se especializara en las áreas de lenguaje y deglución, como también pudo haberse comunicado con el instituto Teletón más cercano, explicándole la situación del niño para que la atención fuera más rápida y eficaz. Pero yo valoro que este profesional se haya hecho a un lado si no se sentía seguro realizando la terapia, pero por el contrario no apoyo que haya dejado al niño sin tratamiento y faltándole a la confianza que le tenían los padres, pudiendo afectar su motivación hacia la terapia del niño retrasándola tal vez aun mas. Además, el tiempo puede ser fundamental en casos de Parálisis Cerebral, por lo que como fonoaudiólogos debemos mantenernos alertas en el cómo actuamos para facilitarnos la tarea afectamos a personas que confían en que nosotros les ayudemos a sanar.
Después de analizar este caso clínico, pude concluir que la decisión tomada por el fonoaudiólogo no fue la más adecuada ya que al no encontrarse en condiciones para realizar la terapia, pudo haber derivado a algún otro fonoaudiólogo que se especializara en las áreas de lenguaje y deglución, como también pudo haberse comunicado con el instituto Teletón más cercano, explicándole la situación del niño para que la atención fuera más rápida y eficaz. Pero yo valoro que este profesional se haya hecho a un lado si no se sentía seguro realizando la terapia, pero por el contrario no apoyo que haya dejado al niño sin tratamiento y faltándole a la confianza que le tenían los padres, pudiendo afectar su motivación hacia la terapia del niño retrasándola tal vez aun mas. Además, el tiempo puede ser fundamental en casos de Parálisis Cerebral, por lo que como fonoaudiólogos debemos mantenernos alertas en el cómo actuamos para facilitarnos la tarea afectamos a personas que confían en que nosotros les ayudemos a sanar.
María
José Danyau Raby
Para finalizar todo este análisis, puedo concluir que, la decisión tomada por el fonoaudiólogo en el caso clínico según mi parecer no fue correcta ya que podía haber considerado muchos puntos importantes, tales como el que los primeros 3 años de vida son cruciales para el desarrollo del niño, porque es ahí cuando mas puede aprender cosas para seguir desarrollándose, y por último el hecho de que el niño haya tenido que esperar un año para poder ir a la teletón, podía haber sido derivado directamente por el fonoaudiólogo. Esto fue muy perjudicial para el pequeño, porque al haber estado tanto tiempo sin ayuda y esperando una respuesta, quizá influyó en que empeorara su parálisis cerebral, porque al aplazar más el tratamiento o terapia disminuyen las posibilidades de obtener un mejor resultado por el nivel de desarrollo y aprendizaje que tenga el niño a esta edad y con este trastorno. Es un gran dilema ético ya que, si él no tenía las herramientas para ayudar al niño, ¿por qué no lo derivó el mismo a la teletón? Surgen muchas preguntas como estas, que al fin y al cabo, la decisión que tome será juzgada.
Para finalizar todo este análisis, puedo concluir que, la decisión tomada por el fonoaudiólogo en el caso clínico según mi parecer no fue correcta ya que podía haber considerado muchos puntos importantes, tales como el que los primeros 3 años de vida son cruciales para el desarrollo del niño, porque es ahí cuando mas puede aprender cosas para seguir desarrollándose, y por último el hecho de que el niño haya tenido que esperar un año para poder ir a la teletón, podía haber sido derivado directamente por el fonoaudiólogo. Esto fue muy perjudicial para el pequeño, porque al haber estado tanto tiempo sin ayuda y esperando una respuesta, quizá influyó en que empeorara su parálisis cerebral, porque al aplazar más el tratamiento o terapia disminuyen las posibilidades de obtener un mejor resultado por el nivel de desarrollo y aprendizaje que tenga el niño a esta edad y con este trastorno. Es un gran dilema ético ya que, si él no tenía las herramientas para ayudar al niño, ¿por qué no lo derivó el mismo a la teletón? Surgen muchas preguntas como estas, que al fin y al cabo, la decisión que tome será juzgada.
Bibliografía
-
Código de Ética, registro N°1145 (1983) .Colegio
de Fonoaudiólogos de Chile A. G. www.colfonochile.cl
-
Póo P ,Parálisis Cerebral Infantil, Servicio de
Neurología Hospital Sant Joan de Dèu, Barcelona, cap.36 (2008).
Ética en la función Fonoaudiológica
Rodrigo Neira
Introducción:
Es
bien sabido por nosotros, los estudiantes, que en una carrera del área de la
salud la diversidad de casos a los que uno debe enfrentarse es gigante. Como
fonoaudiólogos no estamos exentos de encontrarnos en situaciones que van a
solicitar pensar, analizar y actuar de una forma distinta, haciendo necesario que
nos podamos valer del desarrollo que hemos tenido como individuos en nuestros
valores como seres humanos tratando con seres humanos.
El
objetivo de este taller enfocado en un caso clínico simulado, es poder analizar
el caso y expresar cual sería, según el punto de vista de quien escribe, el
correcto actuar del profesional basándose en los conocimientos adquiridos en la
cátedra de Ética Profesional, distintas lecturas complementarias y los puntos
de vista personales dotando este trabajo de una carga valórica personal.
Como
metodología de trabajo, se procederá a presentar un marco referencial que
consiste en una síntesis de los contenidos
teóricos utilizados para abordar el caso y su relevancia para la atención
fonoaudiológica, posteriormente se llevará a cabo el análisis del caso para
llegar a las conclusiones sobre el mismo.
Los puntos a tratarse en el Marco
referencial serán los siguientes:
a.
Programas y estrategias propuestas por el
Ministerio de Salud y de Educación.
b.
Definición del problema planteado.
c.
Epidemiología del problema planteado.
d.
Fisiopatología y/o etiología del problema
planteado, según corresponda.
e.
Factores de riesgos biológicos, sicológicos y
socioculturales del problema planteado.
f.
Signos y síntomas del problema planteado.
g.
Intervención y/o
tratamiento
Marco Referencial
a.
De acuerdo al Ministerio
de Salud y de Educación, la educación que se entrega a los niños afectados por
una Parálisis Cerebral de ser supervisada por un equipo interdisciplinario de
profesionales del área de la salud. En conjunto con esto, la LOGSE (Ley
Orgánica General del Sistema Educativo) señala que los establecimientos
educacionales deben contar con los recursos para dar una buena enseñanza a los
estudiantes con necesidades especiales sin exclusión alguna.
b.
La parálisis cerebral se define
como un trastorno que implica complicaciones motoras progresivas y permanentes
en los afectados provocado por una lesión en el cerebro en desarrollo.
c.
La parálisis cerebral corresponde a
una de las causas más frecuentes de disfunción motora infantil, haciéndose
presente en dos de cada mil niños nacidos vivos.
d. Existen distintas causas para la parálisis cerebral pudiendo mencionarse parto traumatizante, malformaciones congénitas, infecciones durante el embarazo de la madre, prematurez, entre otras.
e. Los factores de riesgo biológicos pueden presentarse en etapa pre, peri y post natal siendo diversas las razones gatillantes de la afección. Desde un punto de vista sociocultural hay que tener en cuenta las dificultades que pueden presentarse cuando el infante afectado vive en sectores aislados de la ciudad para su tratamiento o las complicaciones en establecimientos educativos al tener necesidades especiales.
f. Los síntomas se hacen presente a temprana edad (3 años app) cuando se hacen presentes dificultades para caminar, gatear o sonreír. Se presentan alteraciones en el tono muscular y el movimiento que pueden asociarse a complicaciones a nivel perceptivo (problemas visuales y auditivos) y alteraciones en el habla y el lenguaje.
g. El tratamiento para los afectados por una parálisis cerebral debe ser acorde a las características personales del paciente por lo que es necesaria la realización de una anamnesis. El manejo debe ser llevado a cabo por un equipo interdisciplinario que se enfoque en la estimulación para su desarrollo intelectual y mejora de las habilidades motoras y comunicativas.
Análisis
del caso:
Caso clínico:
“En un
pueblo del sur de Chile un Fonoaudiólogo
dedicado al tratamiento de los trastornos específicos del lenguaje en el
hospital del pueblo. Cierto día, recibe a Pedro de 3 años con diagnóstico de
parálisis cerebral, derivado del neurólogo que pide realizar terapia de
alimentación y lenguaje. El
fonoaudiólogo explica a los padres que él se dedica a cierta área de
trabajo que no incluye la parálisis cerebral y que no la podía ayudar. En tanto
el niño tuvo que esperar hasta el
próximo año cuando pudo viajar a la
ciudad más próxima al centro de
rehabilitación infantil (Teletón).”
El tema central de este caso clínico
tiene que ver con la disposición del profesional a realizar un diagnóstico y
posterior tratamiento en un niño diagnosticado con una parálisis cerebral. El
hecho de no realizar un diagnóstico dado que la especialidad del fonoaudiólogo
se encontraba en un área distinta puede ser considerada una opción válida ya
que escapa de sus conocimientos lo cual puede generar dificultades en un
diagnóstico correcto, lo que pondría en riesgo la integridad del paciente, mas,
un fonoaudiólogo integro debe ser capaz de atender a pacientes de cualquier
área de la fonoaudiología y no debería de encerrarse solo en una población. Hay
que mencionar además, que el hecho de dejar al infante sin atención profesional
por un periodo cercano a un año representa una falta grave desde el punto de
vista valórico al presentarse, a mi parecer, una falta de empatía con el
paciente, y esto es lo que más preocupa, pues como se mencionó en el marco
referencial, una persona afectada por una parálisis cerebral debe ser
supervisada por un equipo interdisciplinario, por lo que, a pesar de no contar
con un diagnóstico completamente veraz del fonoaudiólogo, el paciente no puede
verse desprovisto de atención especializada para su condición.
Para lo expuesto anteriormente, con relación a la
falta de atención por parte del profesional con el joven paciente, es correcto
hacer mención del artículo n°6 del Código Ético del Colegio de Fonoaudiólogos,
el cual dicta “El fonoaudiólogo no podrá rehusar la atención de un paciente cuando
no exista otro colega que pueda hacerse cargo de éste.” Artículo que da un
apoyo al rechazo hacia la actitud del Fonoaudiólogo en cuestión apelando a la
falta de ética profesional.
Propuesta de
intervención:
Comenzando con el hecho de que somos personas tratando a
personas, es necesario ser capaz de ser empático con el paciente, poder ponerse
en su lugar o, en este caso dada la edad del paciente, en el lugar de su
familia, pues esto nos ayudará a tomar las decisiones correctas a la hora de
intervenir.
Posteriormente deben evaluarse las alteraciones
deglutorias presentes en el infante, su capacidad muscular masticatoria, la
respiración, su capacidad de efectuar movimientos voluntarios antagonistas
como, por ejemplo, elevar un pie y bajar el otro mientras está sentado, se debe
evaluar la postura del menor pues presenta influencia en otras áreas como el
habla. Una vez evaluados los aspectos mencionados anteriormente, los problemas
encontrados deben ser corregidos sin olvidar que el cuidado de un paciente con
parálisis cerebral debe ser supervisado por un equipo multidisciplinario.
En el área del lenguaje debemos conocer el nivel de
lenguaje del paciente, su nivel de aprendizaje, detectar si hay presencia de
TEL (entrando así en el área de especialidad del fonoaudiólogo descrito en el
caso clínico) para su posterior estimulación.
Conclusión
Como profesionales no vamos a estar nunca exentos de
recibir casos en los que nuestro juicio se ponga en “jaque”. No es posible para
nosotros ver estas situaciones abstrayéndonos de nuestra realidad de seres
humanos y es necesario que podamos ser capaces de tomar las decisiones
correctas buscando el beneficio del paciente, pues, es una persona que confía
en nosotros y en nuestras capacidades como profesionales para tratar su
condición, es necesario poder corresponder a dicha confianza pues el
fonoaudiólogo no es como otros profesionales del área de la salud, nuestra
formación hace hincapié en nuestro rol dentro de la sociedad y en nuestra
responsabilidad dentro de ella haciendo que el hecho de tener un cartón en mano
que certifique nuestro conocimiento no sea suficiente para nuestro optimo
desempeño profesional, nuestra formación valórica tendrá un papel fundamental
en nuestra labor.
Referencias Bibliográficas:
1.
Código de Ética Colegio de Fonoaudiólogos
2.
Etiología de la Parálisis Cerebral.
Factores prenatales y postnatales (2006). Espacio Logopédico. Consultado el 28
de Mayo desde http://www.espaciologopedico.com/articulos/articulos2.php?Id_articulo=63
3. Asamblea General de las Naciones Unidas
(1948): Declaración Universal de los Derechos Humanos
4. UNICEF ( 1990): Convención sobre los
Derechos del Niño
5. UNICEF (1990): Derechos del Niño
Hospitalizado
Ética
en la Atención Fonoaudiológica
Cristian Tapia - Nelson Valdivia
INTRODUCCIÓN
La
fonoaudiología es una disciplina que trabaja, principalmente, con personas e
interviene en ellas, por este motivo es importante que el profesional
desarrolle un marco valórico que le permita ser empático frente al paciente,
tomando en cuenta todos los aspectos personales, sociales y contextuales de la
persona a la que trata. A su vez, es importante que un terapeuta conozca y
ponga en práctica los principios éticos que rigen su labor, de manera que
cumpla las responsabilidades y deberes que le otorga su profesión.
El
presente informe pretende desarrollar una conciencia ética en el quehacer
fonoaudiológico. Para tal fin, se presentará una situación clínica simulada, la
cual se analizará a partir de los conceptos teóricos entregados en la cátedra
de ética profesional, tal como la axiología, los constructos del cuidar, la
relación terapéutica y los principios éticos en atención de salud. Además, se
examinará la legislación vigente que rige el ejercicio profesional del
fonoaudiólogo, así como la ley estatal de los derechos de los pacientes.
A
medida que se analicen los conceptos descritos y se apliquen a una situación
clínica simulada será posible forjar una postura crítica y práctica rente a
casos de conflicto ético frecuentes en la experiencia profesional. De este
modo, se podrá desarrollar la reflexión ética en los estudiantes que procuran
dedicarse al trabajo terapéutico y construir principios de conciencia social en
los mismos. Finalmente, esto contribuirá para formar profesionales capacitados
con bases valóricas y un sentido de la responsabilidad social, que sean
competentes para enfrentar situaciones controversiales en su vida personal y
laboral.
MARCO
REFERENCIAL
Para
el análisis del caso clínico simulado se considerará la información organizada
en los siguientes puntos:
a) Afecciones de
la Parálisis Cerebral Infantil: La Parálisis Cerebral Infantil (PCI) es un
trastorno motor y de la postura, causantes de limitación de la actividad,
atribuidos a lesiones cerebrales adquiridas, generalmente, en el desarrollo
fetal (Póo, 2008). La intervención fonoaudiológica en estos casos se centra,
principalmente, en los trastornos motores que alteran la deglución e impiden la
alimentación, además del tratamiento del habla y el desarrollo lingüístico
limitado por el deterioro cognitivo.
b)
Epidemiologia de la PCI: En
1990 la incidencia y prevalencia de la PCI en Chile era de 2 cada 1000
habitantes (IRI, 1993). Lo cual convierte a la PCI en un síndrome frecuente
entre la población, que requiere de un equipo interdisciplinario adecuado para
su tratamiento efectivo.
c)
Situación en salud de zonas extremas: Se define a las zonas extremas como regiones que
requieren alta prioridad (LOCGAR, 1993), pero la verdad es que aún poseen
grandes necesidades de recursos primarios en salud, además de profesionales
capacitados para el tratamiento de patologías frecuentes entre su población. En
lugar de eso, tienen escases de especialistas, los cuales, en su gran mayoría,
no atienden por FONASA, por lo cual, la gente debe esperar meses o años por una
interconsulta en las ciudades más cercanas que cuentan con un servicio público
de salud.
d)
Ley 20584 “Derechos de los Pacientes”: En su artículo 1° de las disposiciones generales,
señala: “Toda persona tiene derecho, cualquiera que sea el prestador que
ejecute las acciones de promoción, protección y recuperación de su salud y de
su rehabilitación, a que ellas sean dadas oportunamente y sin discriminación
arbitraria, en las formas y condiciones que determinan la Constitución y las
leyes.”
e)
Código ético de los Fonoaudiólogos: El artículo número 6 dicta: “El fonoaudiólogo no podrá
rehusar la atención de un paciente cuando no exista otro colega que pueda
hacerse cargo de éste.”
ANÁLISIS
“En un pueblo del sur de Chile un
Fonoaudiólogo dedicado al tratamiento de los trastornos específicos del
lenguaje en el hospital del pueblo. Cierto día, recibe a Pedro de 3 años con
diagnóstico de parálisis cerebral, derivado del neurólogo que pide realizar
terapia de alimentación y lenguaje. El fonoaudiólogo explica a los padres que
él se dedica a cierta área de trabajo que no incluye la parálisis cerebral y
que no la podía ayudar. En tanto el niño tuvo que esperar hasta el próximo año
cuando pudo viajar a la ciudad más próxima al centro de rehabilitación infantil
(Teletón).”
En
esta situación particular se puede reconocer el descuido del profesional frente
a la necesidad del paciente de ser atendido, ya que tal fonoaudiólogo solo se
dedicaba al área del lenguaje, por tanto, según su criterio, él no podía
atender a este paciente. De acuerdo con el código de ética del colegio de
Fonoaudiólogos, el terapeuta no puede negarle la atención a un paciente.
En
primer lugar, las condiciones extremas del sur de Chile consideran un difícil
acceso a la atención oportuna de especialistas, puesto que la gran mayoría de
ellos se encuentran concentrados en las ciudades más grandes. La locomoción a
estos lugares se ve dificultada por condiciones socioeconómicas, meteorológicas
y del terreno en las que están insertos estos pueblos y, por consiguiente, las
personas que viven en ellos. Por lo tanto, considerando estos factores, el
fonoaudiólogo que trabaja en zonas extremas, que estén bajo estas condiciones,
posee la responsabilidad de atender a los pacientes que lo requieran y a estar
preparado con los conocimientos teóricos y prácticos para satisfacer las
necesidades del cliente.
En
segundo lugar, lo que el Fonoaudiólogo debió hacer en ese caso es atender al
paciente, ya que dentro de la formación como profesionales se nos entregan los
conocimientos necesarios para atender a un paciente en las diferentes áreas que
abarca esta carrera, por ende, el profesional está capacitado para entregarle
una terapia eficiente a sus pacientes, independiente si se está dedicando a un
área en particular en ese momento determinado. Un fonoaudiólogo debe tener un
conocimiento integral de las diferentes áreas y si no se siente lo
suficientemente preparado, esta bajo la obligación de capacitarse, para así
recordar y aprender los conceptos y procesos necesarios para poder atender al
paciente, pero en ningún caso se le debe negar la atención, sobretodo bajo
condiciones en las cuales vive.
Otro
aspecto a considerar es el largo tiempo de espera que tiene que pasar para la
atención del paciente en caso de denegarle la atención. Esto hace reflexionar
acerca de la ética del profesional que realizó esta supuesta atención, ya que el
deber tanto como fonoaudiólogos y personas es el atenderlo, velando por su
bienestar, con el fin de mejorar su vida lo máximo posible, ayudándolo con algo
tan vital para nosotros como es la deglución, una necesidad vital para el ser
humano. Esta ayuda puede ser durante el tiempo necesario para que el paciente
vaya a atenderse con un especialista en el área, es decir al centro de la
teletón. Esta ayuda seria para mejorar lo más posible, pero dentro de las
capacidades que este profesional posee, luego en el centro, con personas que se
dedican al área específica puedan brindarle un tratamiento mejor.
Finalmente,
la forma de proceder frente a estos casos es atender al paciente, analizando
cuáles son sus capacidades y hasta dónde es posible hacer una mejora frente a
los problemas presentados. Hacerle una evaluación de deglución, para ver si es
capaz de alimentarse solo, o si es necesaria la utilización de una sonda
nasogástrica. Evaluar su lenguaje, y ver cómo es posible ayudarlo,
implementando una terapia que le ayude en sus praxias verbales, estimulando su
musculatura orofacial lo cual le servirá tanto para el habla como para la
deglución. De la misma forma y con el fin de ayudar lo más posible al paciente
en su comunicación, se puede implementar un sistema alternativo de
comunicación, lo cual busca hacer más eficiente y fácil este proceso para este
niño, y para un mayor entendimiento con las personas a su alrededor más
cercano.
Todas
estas intervenciones deben ir complementadas con empatía y con un trato humano
y cercano con el paciente, ya que es primordial hacerle sentir confianza en
este proceso, el cual es muy difícil tanto para el como para su familia y para
que el progreso en esta terapia sea lo más eficiente y rápida posible, con la
ayuda del paciente.
CONCLUSIÓN
En el
presente caso podemos ver como las malas prácticas de la carrera en el
incumplimiento del código de ética y de la ley de los derechos de los
pacientes, hacen que se perjudique la salud y la integridad de la persona. Es
por esto que en la práctica fonoaudiológica no podemos dejar de lado todas
estas normas que nos rigen como profesionales y, más importante aún, no podemos
olvidar que estamos tratando con seres humanos, los cuales merecen el mejor
trato que podamos darles, siendo empáticos con ellos y sus dificultades, poniendo
en primer lugar su bienestar.
La
manera que se enfrenta al paciente y su familia es determinante en la práctica terapéutica,
para este fin, existen los códigos éticos, los cuales velan por que se entregue
un servicio de calidad a la comunidad. De este modo, se asegura la mejor
atención posible a los problemas que puede presentar el paciente.
Nuestro ejercicio como
fonoaudiólogos no se debe regir solamente por las normas externas que dictan
ciertas instituciones, sino también estar dirigido por nuestros propios
valores, los cuales tienen que quedar plasmados en cada atención, cada palabra
y cada gesto durante nuestro desarrollo como profesionales. Por lo tanto, es
fundamental que los terapeutas cuenten con valores definidos e internalizados,
a fin de ayudar a los pacientes a resolver sus dificultades.
REFERENCIAS
BIBLIOGRÁFICAS
Apuntes de catedra de ética profesional
Póo, P. (2008) Parálisis
Cerebral Infantil. Barcelona: Asociación Española de Pediatría.
Código de ética del colegio de fonoaudiólogos. (1985)
Ley 20584 de los Derechos de los pacientes. (2012)